Ubicado como uno de los principales grupos exponentes del rock mexicano, el Haragán y Cía. se han labrado un lugar en el movimiento musical nacional a base de grandes esfuerzos y luchando contra el malinchismo que prevalece en prácticamente todas las estaciones de radio y en los canales de televisión, que tienen vetados a este tipo de agrupaciones para presentarse en su espacios.
Desde sus inicios en Tlalnepantla, Estado de México, en 1989 esta banda fundada por Luis Antonio Álvarez (guitarrista y gritante) y Jaíme Rodríguez (bajista), buscó los lugares necesarios para darse a conocer con su música, con una tendencia más hacia el rhythm and blues, y letras en las que reflejan la problemática juvenil urbana, hecho por el que se les ubicó dentro de un género llamado rock urbano.
Poco a poco y gracias a su recorrido por diferentes colonias del Distrito Federal y de los municipios del Estado de México que conforman la zona metropolitana, El Haragán y Cía. se hizo de sus seguidores, en especial jóvenes de las clases sociales marginales que se identificaban con los temas de sus canciones, pues de manera puntual reflejaban la precaria situación que enfrentaban día a día.
Gracias a su tenacidad, para 1990 llegan a la compañía Discos y Cintas Denver, que les da la oportunidad de grabar lo que fue su primera producción “Valedores Juveniles”, en el que cuentan con el apoyo de músicos invitados como Rodrigo Levario de Heavy Nopal, Juan Mejía y Jaime Mejía, del grupo YEY, y Octavio Espinosa “El Sopas”, en el saxofón.
Este fue el despegue de una trayectoria de casi 22 años y en la que ya suman 13 discos, todos ellos llenos de vivencias cotidianas, entre las que podemos encontrar desde los excesos hasta la pasión y el amor, con letras bien acompañadas por elemento musicales que van desde el Rythm and Blues, hasta la balada, pasando por el blues, el hard rock y el heavy metal.
Así, de manera simple, podemos asegurar que en cada canción El Haragán y Cía. nos muestra diversas escenas llenas de vivencias de la gente común que sobrevive en medio de la gran urbe que es la Zona Metropolitana, hechos que poco compositores pueden darse el gusto de reflejar.
“Mis letras”, ha reconocido en varias ocasiones Luis Antonio Álvarez, líder de la agrupación, “tienen mucho que ver con las ciudades, es como si escucharas a Chava Flores, él es mi primera influencia para platicar las cosas, pero a veces lo hago chistoso o a veces es trágico”.
Un factor que ha caracterizado al grupo es el hecho de que desde su fundación los principales escenarios en los que se han presentado son los llamados hoyos funky ubicados sobre todo en las colonias populares y marginales de la periferia del Distrito Federal y del Estado de México, en donde ha logrado consagrarse gracias a la aceptación de los jóvenes que a ellos asisten desde hace más de dos décadas.
Esta aceptación ha permitido que sus presentaciones se hayan dado también en diversos foros ubicados en el interior de la República Mexicano, así como en algunas ciudades de Estados Unidos y América Latina, pero también en grandes escenarios nacionales, entre los que destacan El Vive Latino y el Teatro Metropólitan.
Precisamente este viernes El Haragán y Cía. pisará nuevamente el escenario del Metropólitan para presentar su nuevo material discográfico “Volviendo a casa”, integrado por 13 temas nuevos, además de que entonará los grandes éxitos que ha alcanzado durante su trayectoria.
Así, esta es una buena oportunidad para ir a escuchar a la banda que cual vil juglar o trovador nos hablará sobre la realidad de muchos de los jóvenes capitalinos, pero sobre todo de aquellos que viven en la marginación o en las clases bajas y que día a día tienen que sobrevivir su realidad en medio de grandes carencias y sufrimientos.
Aprovechemos y escuchemos una expresión que difícilmente nos permiten escuchar por la radio o la televisión mexicana, pero sobre todo, apoyemos a estos valerosos rockanrroleros que han lucha contra todo para colocarse como una de las bandas más representativas del rock nacional.
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