“Drácula, el no muerto” o el intento por acabar con el mítico y despiadado Vampiro

Por Jorge Reyes Ontiveros

Hablar de Drácula, siempre nos lleva a recordar al maldito y despiadado Conde de Transilvania que en lo único que piensa es en saciar su apetito voraz de sangre, sin ningún viso de compasión y piedad por nadie.

Así, al presentarse lo que pretende ser la secuela de la ya centenaria novela escrita por Bram Stoker, el lector busca en la historia encontrar a ese ser despiadado recorriendo el mundo en busca de venganza y acabar con la cuadrilla que lo acorraló y que en un principio creía que había acabó con él.

Siempre se ha dicho que las segundas partes por lo regular son malas y en muchos casos ha sido así, pese a que las continuaciones siguen la pauta de sus antecesoras, ya sea en libros o películas, pero debido a los malos argumentos y tramas terminan rompiendo con el encanto que alcanzó la primera parte de la historia.

En el caso que nos ocupamos en esta ocasión podemos decir que la secuela que se pretende hacer de la gran novela “Drácula”, de Bran Stoker, es totalmente arriesgada pues “Drácula, el no muerto”, se enfoca en acabar con la mítica figura del mal que ha representado por más de un siglo el Conde de Transilvania para los amantes del género del terror.

Dacre Stoker, descendiente directo de Bram, e Ian Holt, se lanzan a una aventura literaria para retomar algunos de los manuscritos que dejó el autor de Drácula y a partir de ellos iniciar su historia años después de que la partida de héroes encabezados por Jonathan Hacker y el doctor Van Helsing dieron fin al poderoso vampiro que arribó a Inglaterra para extender su reino del mal.

Así, el relato de la dupla Dacre-Ian se sitúa en 1912 y tiene como escenarios principales Francia e Inglaterra y nos cuenta la manera en como las vidas de los protagonistas  se vieron afectadas luego de la lucha que tuvieron contra Drácula, debido a que no supieron sobreponerse a los traumas vividos en dicha aventura.

Pero no sólo eso, ambos autores rompen con el encanto, si así se le puede llamar, que tiene Drácula entre millones de seguidores, ya que al pasar las páginas con su historia pretenden redimir al vampiro y nos lo presentan como un ser que pretende acabar con un mal superior que ha dejado una cadena de dolor y maldad por muchas naciones de Europa.

Y no conformes con esto, en un intento de forzar la historia en la Inglaterra del inicio del siglo pasado, también pretenden darle un nuevo sentido a la figura del mítico Jack El Destripador, aquel asesino serial que dio muerte a cinco prostitutas y desapareció sin dejar rastro alguno que permitiera identificarlo para llevarlo ante la justicia, aunque sus acciones fueron suficientes para hacer de él un ser conocido a nivel mundial.

No conformes con lo anterior, Drace y Ian, en un intento poco entendible incluyen entre sus personajes secundarios a Bram Stoker en el papel de un empresario teatral y de un escritor obsesionado en montar en el más importante de los teatros ingleses su mayor obra: “Drácula”.

Con estos elementos como ejes rectores, se desarrolla esta historia en la que se enredan drama, sangrientos asesinatos, inconformidades, problemas existenciales y un sinfín de intrigas en las que se ven involucrados cada uno de los personajes que el mismo Bram Stoker nos muestra en su novela, destacando sobre todo Mina Hacker y uno nuevo, su hijo Quincey quien se convierte en el hilo conductor de toda la trama.

Un factor que se les tiene que reconocer a los autores es el hecho de que su narrativa es buena y fluida, además de que en todo momento pretenden respetar el estilo de “Drácula”, sin retomar prácticamente el tinte epistolar o de los diarios personales que marcan lo que de ahora en adelante será la primera parte de esta novela.

Así, es muy factible que los amantes del vampiro de Transilvania no acepten para nada esta nueva novela lanzada al mercado a finales del 2009 por la casa RocaEditorial, por la pretensión de hacer de él un ser preocupado por la humanidad y decidido a terminar con el mal real que encarna un enemigo muy peligroso al que tiene que hacerle frente y que también es de la raza vampírica.

A pesar de estos factores, creo que es importante que los seguidores de Drácula le echen una leída y a partir de ella hagan sus propias evaluaciones y reflexiones respecto a si fue o no adecuado este intento realizado por la dupla Drace-Ian.

Busca The Gathering elevarse por los cielos húmedos del DF para desplegar su Metal Gótico

Desde las frías tierras de los tulipanes, los holandeses de The Gathering desplegarán su Metal Gótico en los húmedos territorios del Circo Volador para encabezar una ceremonia musical con sus adeptos a fin de elevar a grandes alturas la gran comunión que han establecido desde hace varios años.

A 22 años de su fundación en la ciudad de Oss, Holanda, el combo europeo regresa este viernes 8 de julio a tierras aztecas para promocionar su más reciente disco, The West Pole, así como para satisfacer el deseo de sus seguidores y tocar los temas más emblemáticos de sus 18 producciones en estudio.

Los integrantes de The Gathering, Silje Wergeland, René Rutten, Marjolein Kooijman, Hans Rutten y Frank Boeijen,  arriban a México para culminar lo que es su gira Latinoamericana “Ghost Ride Tour”, la cual los llevó a presentarse en escenarios de Perú, Bolivia, Chile, Argentina, Brasil y Colombia, entre el 24 de junio y el 8 de julio.

Tal y como lo ha hecho por los escenarios de Sudamérica, se espera que para su presentación de este viernes deleiten a los amantes de su música con canciones como “Herbal Movement”, “Saturnine”, “Shot the Pieces”, “Leaves”, “A Constant Run”, “Great Ocean Road”, “Treasure”, “In Motion #1”, “Eleanor”, “No One Spoke”, “All Your Are”, “Broken Glass”, “Heroes for Ghosts”, “On Most Surfaces” y “Travel”.

Esta banda, que junto con Theatre of Tragedy, está considerada como de las fundamentales del Metal Gótico, llega precedida de una gran historia que arranca en 1989 cuando Hans y René Rutten, Bart Smits, Hugo Prinsen Geerligs, Jelmer Wiersma y Grank Boeijen, asentados en la ciudad de Oss deciden fundar una banda que  n o sólo rescatara los fundamentos del metal, sino que incluyera fundamentos especiales como voces potentes y bien educadas, así como acompañamientos melódicos.

Para 1990 graban su primer demo titulado “An Imaginary Symphony” y gracias al éxito que tuvieron en diversos escenarios locales consiguieron su primera actuación como grupos abridores de las bandas Deadhead e Invocator.

Este hecho acelera la creatividad de la banda, lo que les permite componer nuevos temas que integran a lo que sería su segundo EP, “Moonlight Archer”, que tuvo un gran recibimiento entre el público y los críticos, lo que los posicionó nuevamente en un buen lugar que los catapultó para ser los teloneros de bandas reconocidas como Samael, Morbid Angel y Death.

El crecimiento que lograron en poco tiempo los puso en la mira de la disquera Foundation 2000 con quien firman en 1992 un contrato que les permite grabar su primer Larga Duración “Alway…”, en el que se sumó la voz de Marike Groot a la de Bart Smits, lo que generó un dueto que le dio un sello distintivo a la banda, pero que también marcó la salida de ambos luego que una serie de diferencias sobre el rumbo que pretendían tomar el resto de los integrantes de la banda.

Un año después, ya con Niels Duffhues y Martine van Loon en las voces, graban su segunda producción “Almost a Dance” y después de la cual ambos dejan la agrupación por no llenar las expectativas que se tenían con ellos, por lo que de inmediato buscan nuevos sustitutos. Es así como luego de audicionar y sorprender a la banda con su voz, llega al grupo Anneke van Giersbergen.

A la par, el sello Century Media les ofrece un jugoso contrato que los lleva a grabar en 1995 uno de sus mejores discos, “Mandylion”, que los posiciona ya como una de las mejores bandas en toda Europa, hecho que coronan con una serie de presentaciones por diversas naciones del viejo continente.

A partir de este momento, la producción musical de The Gathering es constante, en 1997 producen “Nighttime Birds”, en 1998 “How to Measure a Planet?”, en el 2000 “Superheat”, disco en vivo, y “If_then_else”, en estudio; en 2001 “Downfall:The Early Years”, en el que se conjuntan sus dos EP, además de un sigle innédito.

Para el 2002, y una vez que terminó su contrato con Century Media, la banda se mete a los estudios del sello Psychonaut Records, que ellos mismos fundaron en 1998, para grabar el mini álbum “Black Light District”, así como reeditar su dos primeros álbumes; en 2003 lanzan “Souvenirs”. Un año después, bajo su anterior sello sale a la venta “Sleepy Buildings- A Semi Acoustic Evening”, directo grabado e n Lux.

Para el 2005 reeditan Mandylion con temas extras; seguido de “Home” en 2006, que fue el último en el que participó Anneke van Giersbergen, ya que en el 2007 y luego de permanecer 13 años en la banda decidió dejarla para enfocar sus actividades a más hacia ella misma y hacia su familia, pero sobre todo para perseguir “nuevas metas en lo musical”, según informó a través de un comunicado oficial.

Luego de esta salida, el grupo recluta a Silje Wergeland en 2008 y con quien graban lo que es su última producción, “The West Pole”, la cual fue lanzada en al año 2009, y que de acuerdo con los críticos y sus fans, pese a que se extraña la personalidad de Anneke, en las vocales no hay nada que extrañar ya que Silje, quien durante ocho años fue la vocalista de la banda noruega Octavia Sperati, la ha reemplazado de manera perfecta, lo cual se podrá constatar este viernes en el Circo Volador.

Así que todo se encuentra listo para que la banda holandesa se eleve por los cielos de la Ciudad de México para desplegar al máximo lo mejor de su Metal Gótico.

La voz de El Haragán y Cía. llega al Metropólitan para fotografiar la realidad de la juventud marginada

Ubicado como uno de los principales grupos exponentes del rock mexicano, el Haragán y Cía. se han labrado un lugar en el movimiento musical nacional a base de grandes esfuerzos y luchando contra el malinchismo que prevalece en prácticamente todas las estaciones de radio y en los canales de televisión, que tienen vetados a este tipo de agrupaciones para presentarse en su espacios.

Desde sus inicios en Tlalnepantla, Estado de México, en 1989 esta banda fundada por Luis Antonio Álvarez (guitarrista y gritante) y Jaíme Rodríguez (bajista), buscó los lugares necesarios para darse a conocer con su música, con una tendencia más hacia el rhythm and blues, y letras en las que reflejan la problemática juvenil urbana, hecho por el que se les ubicó dentro de un género llamado rock urbano.

Poco a poco y gracias a su recorrido por diferentes colonias del Distrito Federal y de los municipios del Estado de México que conforman la zona metropolitana, El Haragán y Cía. se hizo de sus seguidores, en especial jóvenes de las clases sociales marginales que se identificaban con los temas de sus canciones, pues de manera puntual reflejaban la precaria situación que enfrentaban día a día.

Gracias a su tenacidad, para 1990 llegan a la compañía Discos y Cintas Denver, que les da la oportunidad de grabar lo que fue su primera producción “Valedores Juveniles”, en el que cuentan con el apoyo de músicos invitados como Rodrigo Levario de Heavy Nopal, Juan Mejía y Jaime Mejía, del grupo YEY, y Octavio Espinosa “El Sopas”, en el saxofón.

Este fue el despegue de una trayectoria de casi 22 años y en la que ya suman 13 discos, todos ellos llenos de vivencias cotidianas, entre las que podemos encontrar desde los excesos hasta la pasión y el amor, con letras bien acompañadas por elemento musicales que van desde el Rythm and Blues, hasta la balada, pasando por el blues, el hard rock y el heavy metal.

Así, de manera simple, podemos asegurar que en cada canción El Haragán y Cía. nos muestra diversas escenas llenas de vivencias de la gente común que sobrevive en medio de la gran urbe que es la Zona Metropolitana, hechos que poco compositores pueden darse el gusto de reflejar.

“Mis letras”, ha reconocido en varias ocasiones Luis Antonio Álvarez, líder de la agrupación, “tienen mucho que ver con las ciudades, es como si escucharas a Chava Flores, él es mi primera influencia para platicar las cosas, pero a veces lo hago chistoso o a veces es trágico”.

Un factor que ha caracterizado al grupo es el hecho de que desde su fundación los principales escenarios en los que se han presentado son los llamados hoyos funky ubicados sobre todo en las colonias populares y marginales de la periferia del Distrito Federal y del Estado de México, en donde ha logrado consagrarse gracias a la aceptación de los jóvenes que a ellos asisten desde hace más de dos décadas.

Esta aceptación ha permitido que sus presentaciones se hayan dado también en diversos foros ubicados en el interior de la República Mexicano, así como en algunas ciudades de Estados Unidos y América Latina, pero también en grandes escenarios nacionales, entre los que destacan El Vive Latino y el Teatro Metropólitan.

Precisamente este viernes El Haragán y Cía. pisará nuevamente el escenario del  Metropólitan para presentar su nuevo material discográfico “Volviendo a casa”, integrado por 13 temas nuevos, además de que entonará los grandes éxitos que ha alcanzado durante su trayectoria.

Así, esta es una buena oportunidad para ir a escuchar a la banda que cual vil juglar o trovador nos hablará sobre la realidad de muchos de los jóvenes capitalinos, pero sobre todo de aquellos que viven en la marginación o en las clases bajas y que día a día tienen que sobrevivir su realidad en medio de grandes carencias y sufrimientos.

Aprovechemos y escuchemos una expresión que difícilmente nos permiten escuchar por la radio o la televisión mexicana, pero sobre todo, apoyemos a estos valerosos rockanrroleros que han lucha contra todo para colocarse como una de las bandas más representativas del rock nacional.